Angela Botero escribe toda-vía

25.07.2011 11:06

La autora vive en Barcelona donde se dedica a su familia.
Se trata de poemas breves, sencillos que juegan con el lenguaje.
La escritora antioqueña publica un nuevo libro luego de cuatro años.

Por Carmen Elena Villa Betancourt

La letra de Angela Botero López es más famosa que su propio rostro. Sus libros son escritos a mano y así se venden. Cuenta que cuando vivía en Medellín y tenía que firmar un cheque o cualquier otro documento, la gente le preguntaba ¿Cierto que usted es la escritora de la letra bonita?.

Sus frases cortas, simples y sabias, estuvieron de moda hace algunos años porque cautivaban, especialmente al público joven que las leía, copiaba, dedicaba e incluso imitaba.

En el año 2000 había publicado su último libro Entre tanto. La semana pasada salió su nueva recopilación de frasecitas titulada Toda-vía tú. Desde Barcelona, donde vive actualmente, habló de sus letras y sus ideas.

¿Cómo descubrió y se cultivó en esta manera tan particular de escribir?
"En el colegio siempre hacía las tarjetas y los trabajos de filosofía de mis amigas mientras que ellas me hacían los de álgebra y trigonometría. Escribía cositas que iba guardando. No fue fácil seleccionar las frases para mi primer libro.

Éste lo publicaron dos amigos que en ese entonces eran mis jefes cuando trabajé en la Tienda Creativa: Juan Carlos Molina y Álvaro Vargas. Ellos se entusiasmaron con la idea y la mitad de la edición la regalaron a los clientes de la agencia y la otra mitad la vendimos y de ahí publicamos el segundo libro , el tercero y ahora llegamos al décimo cuarto.

Luego lo empezó a comercializar la editorial Norma hasta hace cuatro años y ahora quisimos volver a empezar".

¿Por qué le gusta tanto jugar con las palabras?
"Me encanta mirar que cada palabra tiene muchos significados. Tú puedes decir una cosa y a la vez decir dos o tres más. Los diccionarios y los idiomas me encantan. Es muy lindo ver que una palabra tenga tantas raíces".

¿A qué se dedica en Barcelona?
"Vivo aquí hace cuatro años porque a mi esposo se le presentó una oportunidad de trabajo.

Inicialmente me dio muy duro, pero ahora estoy contenta, dedicada a mi hogar y tengo otra etapa de la vida. Ese es todo mi mundo. Mi casa queda en las afueras de la ciudad, tiene tres pisos y yo hago todas las labores domésticas.

Tengo un marido y una hija, Isabel de 12 años, que desayunan, almuerzan y comen en casa y esto demanda mucho tiempo. Yo pensé que jamás me iba a dedicar a esto. Una mujer ama de casa, lo veía como algo escandaloso, pero atenderlos a ellos es lo que más me gusta en la vida. El tema de trabajo, por ahora, lo cancelé".

¿Qué busca cada vez que publica un nuevo libro?
"Yo no pretendo nada. Cuando escribo mis cosas, lo que hago es limpiarme, aclarar, encontrar razones. Eso me alivia el alma y creo que le alivia el alma a mucha gente. Cuando alguien dice "este escrito me sale", es porque tiene un sentimiento exactamente igual al mío y que no ha sacado. Hay personas que quisieran decir algo pero no saben cómo. Es como cuando uno admira a un bailarín y no puede seguir sus pasos. Pero alguien puede hacer ese trabajo por ti y tú puedes tomarlo y llevarlo contigo.

Me asusta que alguien quiera saber más de mí porque yo no tengo nada más que decir. No me gusta que la gente me mire y piense que estoy por encima de algo".

Algunos dicen que no es poesía ¿qué piensa de esto?
"Yo no escribo para que me critiquen. Lo hago porque me gusta y porque sé que a otra gente le gusta. Yo no he dicho nunca que soy poeta, a mí me gusta el término de poesía, hay gente que dice que lo que yo escribo son grafittis, renglones o frasecitas. A mí me da igual. No estudié para eso, no sé nada de métrica, simplemente es algo que fluye. Me pueden clasificar como quieran y a mí no me molesta".

¿Qué le gusta leer?
"No soy una devoradora de libros, soy más bien una gran saboreadora. No soy muy amiga de leer novelas porque eso me lleva sólo a conocer la trama y el final de una historia. Me gusta, en cambio, leer una página que por complicada que sea, me lleve a sentir cada palabra. Leer un poema sí me llena el alma. Leo autores como Fernando Pessoa, Alejandra Pizarnik, Miguel Hernández y, por supuesto, Pablo Neruda y Porfirio Barba Jacob. Yo puedo navegar en un poema dos semanas".

¿Por qué es tan importante para usted la vida interior?
"Porque todo está ahí. Lo tienes tú adentro pero a veces pasa que lo esencial de tu vida lo buscas afuera. La gente cree que necesita más espectáculos, más bulla, más cosas... Pero lo que hay que hacer es llenarse de sí mismo. Me gusta la vida tranquila y por eso vivo en un lugar apartado".

¿Qué la inspiran a escribir?
"Lo que me rompe el alma. Puede ser dolor, angustia o alegría. Por lo general son más sentimientos negativos porque son mucho más fuertes, duraderos y violentos.

Cuando alguien saca lo negativo, se convierte en positivo pero hay que exponerlo a la luz para que desaparezca".

El detalle de las cositas simples que te hacen feliz
Conchita López*

"Un poeta es el que escribe cosas que la gente quiere leer porque tocan sus sentimientos y eso Ángela lo hace muy bien. Su poesía es transparente, ella siempre dice la verdad. A esa sencillez ella le agrega el ingrediente de jugar con las palabras, esto es lo que más altura le da a los poemas. Si uno se pone a ver los proverbios chinos son cortos y sencillos pero llenos de sabiduría y así escribe ella. Bien decía Antonio Panesso que "Angela una plumilla de ángel y un poco de bilis negra ha creado este pequeño mundo en el cual cabemos todos". Es ideal para los muchachos que no les gusta mucho la lectura porque se dejan atrapar textos tan cotidianos que marcan un estilo propio y después buscan otros autores"